La Corte Suprema de Justicia se debate entre la dignidad y la prostitución
El abogado José Ricardo Mejía Jaramillo asegura que la Corte Suprema de Justicia debe decidir este jueves, 8 de febrero de 2024, quién debe ser la próxima Fiscal General de la Nación. Dice que es la primera vez que la Corte podrá decidir sobre un terna conformada por personas con origen en la rama judicial, que no son amigas del Presidente, ni son cercanas a cualquier grupo político.
Las candidatas Ángela María Buitrago Ruiz, Luz Adriana Camargo Garzón y Amelia Pérez Parra son mujeres investigadas a profundidad y no les han podido encontrar ningún pecado.
“Son pulcras, serias, con trayectoria jurídica anticorrupción, con carácter e independencia. Por tanto no hay motivo por el cual la Corte no pueda elegir. Es su deber constitucional y legal elegir sin dilación o, en su defecto, dejar a una persona absolutamente sub judice”, explica.
Teme que si no hay elección, la Fiscalía quedaría en interinidad con la salida de Francisco Barbosa -a quien considera un loco a punto de quedarse sin empleo- y en manos de la vicefiscal Martha Janeth Mancera, a quien considera sub judice por su supuesta vinculación con poderes oscuros del narcotráfico.
José Ricardo Mejía dice que es escéptico con las Cortes porque están conformadas por magistrados que llegan prostituidos, manoseados y, por tanto, asegura que hay que hablar de una reforma a la justicia en la que se toque a los altos dignatarios del Estado, para evitar la impunidad.
“Si fuera así, el fiscal Barbosa, a quien considera una vergüenza, no hubiera incurrido en los excesos en que ha incurrido”, concluye, enfatizando que es una vergüenza que la Corte Suprema de Justicia dilate el proceso de elección a la próxima Fiscal General de la Nación.
